Que se haga la luz 💛
- 6 oct 2023
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6 | octubre | 2023
Querida comunidad:
¡ES VIERNES DE NEWSLETTER! Y la felicidad que me da crear este momento. Este momento de disfrute de sentarme a escribirles, de preparar todo un entorno que me hace sentir en paz e inspirada, este momento de gratitud en el que pienso en cada uno de ustedes que abre este correo y entonces empieza el viaje juntxs. GRACIAS POR ESTAR AQUÍ, gracias por su energía y gracias por caminar conmigo. Les dejo la canción de esta entrega, que les pido una disculpa, a veces se me olvida compartirla: Esta canción la escuchaba mucho en un momento de mi vida en el que necesitaba muchísima valentía. Esta canción era inspiración. Apenas la escuché esta semana que salió random en mi playlist y ¡wow! lo que he crecido desde ese momento hasta ahora, tuve un rush de felicidad y gratitud, así que se las dejo para que reconozcan el camino andado y, si hay algún lugar del que necesiten irse, que te de la esperanza de que detrás de esa decisión está lo mejor de tu vida. Bueno... Ahora sí empezamos con la entrega de hoy. ¿Qué les parece? Que aquí les va un chismecito que si llevan muchos años acá ya se lo saben, si no ahí les va con actualizaciones y, por supuesto, una enseñanza increíble que llegó de la mano de mi amada práctica de yoga, te pido que te quedes conmigo hasta el final. 💗 Hace unos años tuve una amiga que copió todo mi trabajo, empezó a hablar como yo, empezó a contar mi historia como suya, cuando descubrí esto (porque me había bloqueado siendo amigas) la enfrenté y pues bueno, teníamos algunos proyectos juntas, ella tenía dinero mío, no me lo pagó por supuesto (eran aprox $1000 dls), me dijo cosas horribles, me bloqueó y siguió replicando mi trabajo. Total, en su momento fue súper doloroso para mí por muchas razones. Más allá de la traición que sentí (6 meses después de la infidelidad de mi ex, así que mi herida de traición estaba ON POINT), despertó todas mis inseguridades. Ésa fue la razón por la que dejé de hacer círculos de sanación de útero porque no quería que ni por error nos relacionaran o nos compararan o algo (primera vez que lo confieso) y empecé a hacer todo lo demás de MVI: nació mi entrenamiento de autosanación y todos mis programas en línea. Gracias a estos sucesos en mi vida, me metí más que nunca a sanar, a sanar la raíz de esas experiencias, fue cuando aprendí todo lo que sé de heridas y árbol genealógico. Lo empecé a trabajar en mí y bueno, se abrió un mundo de posibilidades. Yo haciendo alquimia con mis procesos desde siempre: sacar un diamante de entre la densidad y oscuridad que esté viviendo. Total, yo de esta chica he seguido sabiendo porque el mundo de sanación es un pañuelo, entonces de pronto gente random me dice "oye... ¿supiste que a fulana le pasó tal?" o cosas así. Hasta donde me quedé hace como un año ya no hacía cosas de sanación de útero y pues equis, seguí en lo mío. La semana pasada, igual por casualidad me enteré de que tenía cosa de un mes GRABANDO VIDEOS EN TIKTOK HABLANDO DE SANACIÓN DE ÚTERO IGUAL QUE YO y que había regresado a hacerlos. La verdad, más allá de enojarme, me dio risa y más allá de la risa para mí fue como: "qué paz llegar a este momento en el que creo tanto en mí, en el que estoy tan segura de quién soy y de la calidad inigualable de mi trabajo que nada puede intimidarme". O eso pensaba a nivel consciente. (Aquí les va la verdad verdadera jajajaja). Me quedé pensando: "¿Por qué se presenta de nuevo en mi vida ese ser? ¿Por qué me lo vuelvo a presentar?" El martes llegué a clase de yoga que, por cierto, no quería ir, iba de malas y todo jaja, simplemente no quería. Y, al momento de establecer la intención, mi intención fue: sanar lo que sea que tenga que sanar en general, no me refería a nada específico. Empezó la serie, y de pronto me nació con cada respiración enviarle luz a ella, y luz a lo que sea que nos hizo encontrarnos en el camino y de pronto LA ILUMINACIÓN. Me llegó lo siguiente: "Envía luz a cada parte de ti que se sintió o se siente tan insegura como para conectar con una persona así en cualquier nivel". Y eso hice, con cada respiración visualicé e intencioné enviar luz a todas mis inseguridades, pasadas o presentes, a todas aquellas heridas o pautas de pensamiento que me han hecho compararme o intimidarme ante personas como ésta. Y, poco a poco, todo se transformó en compasión hacia mí y finalmente hacia ella. Me di cuenta que si bien no me movió como hace años, sí regresó un poco el enojo y el sentimiento de injusticia y en lugar de enfocarme en ella en decir "qué pesar que tenga que copiar", regresé el enfoque a mí, a mi propio proceso, a abrir en mí el espacio para que se haga la luz. Y estoy segura que se hizo. Está de más decir que ya no tengo enojo, ni siento injusticia, ni siquiera lástima, hoy estoy en paz. Así que mi invitación de esta entrega es que cierres los ojos y que con cada respiración pidas llevar luz a cada parte de ti que hoy se siente insegura, a cada parte que hoy se siente herida, a cada parte de ti que hoy te hace sentir que no eres suficiente. Hazlo sin expectativas y mantente observante de qué cambia en ti, de qué pasa y cómo te sientes. Diosito (o Universo) es increíble. Nos recuerda en cada experiencia que podemos elegir el miedo o el amor. Que podemos elegir tomarla para aprender o para hundirnos en el abismo del victimismo y el dolor. ¿Qué eliges hoy? Vámonos a la luz mis amores 💗. Bienvenida a tu vida iluminada. 🫶🏼💫
Gracias por estar aquí,
Ale
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