10 | noviembre | 2023
Querida comunidad:
¿Cómo están? Esta es la tercera entrega que escribo desde el cel y no deja de sorprenderme lo rápido qué pasa el tiempo jaja.
¡¡Uuff!! Esta semana han pasado tantas que parece que han pasado mil vidas en solo 7 días.
Más lo que les quiero compartir desde el sábado mismo es lo siguiente:
Fueron los XV años de la nieta de Emi, la señora que trabaja conmigo en mi casa. Me invitaron y fue UN FIESTÓN y me encantó. El vestido de la quinceañera un sueño, el vals divino y el pastel también divino.
Bueno, Emi tiene varias nietas entrando en la adolescencia y bien adolescentes también, y me he convertido en su consejera vocacional. Cuando tienen algún tema en casa, que no están bien, que quieren dejar la escuela o lo que sea, Emi me las trae y hablo con ellas.
Para mí es importantísimo que esas niñas estudien porque sé que es la única manera de que cambien la historia de su familia, que salgan de un entorno complejo y que puedan darse a sí mismas la movilidad social que las lleve a tener relaciones diferentes.
Hasta el momento, mis consejos han llegado a buen puerto. No han dejado la escuela. 💗
El punto es que el sábado, viendo a la quinceañera me pregunté:
Si pudiera ser como un hada madrina ¿qué le regalaría?
Mi respuesta fue:
Le regalaría la capacidad de creer que para ella es posible absolutamente TODO.
Le regalaría el poder de ver todo lo que puede crear.
Me acordé de las personas que me rodearon cuando crecí, y estuve rodeada de hombres que me dijeron (entre ellos mi papá) que yo podía ser lo que yo quisiera.
Mi enseñanza básica (y yo pienso que por eso mi hermana y yo somos como somos) 😂 fue:
“Tú puedes mostrarte a ti misma el mundo entero. Sé la mujer que sabe hablar por lo menos inglés, que sabe de historia, arte y política. Que tiene un criterio propio. Sé la mujer que ha viajado y visto el mundo por ella misma para que ningún cabrón (palabra de mi papá) venga a apantallarte”.
Y esas palabras han resonado en mí:
“Tú puedes ser lo que tú quieras”.
De ahí viene la valentía, sí ésa es la palabra, para que mi hermana y yo hayamos tomado las decisiones de vida que hemos tomado:
- Cambiar de ciudad.
- No casarnos.
- No querer ser mamás (y no porque tenga algo de malo, solo no queremos).
- Trabajar diferente a la mayoría, ser nuestras propias empleadoras.
- Darnos a nosotras lo que queremos y no esperar que alguien más lo haga.
Bueno, todo esto se los cuento porque mi reflexión fue la siguiente (IMAGÍNENME PENSANDO TODO ESTO MIENTRAS VEÍA EL VALS 😂)
<< Qué importante son las palabras en la narrativa de vida de las personas. >>
<< Qué importante es decir palabras empoderantes a las nuevas generaciones. >>
<< Qué importante es crear nuestra PROPIA NARRATIVA y escucharla en tiempos de adversidad. >>
Y esto último es lo que quiero que te quedes:
Que sepas que no importa si nadie te dijo que podías ser quien tú quisieras ser, el día de hoy eres la (o el) adulto responsable de tu vida, la capitana de tu barco y la persona encargada de decirte lo que necesitas decirte.
¿Y si hoy creas la narrativa con la que te hubiera gustado crecer?
¿Si hoy eres la persona que te dice lo que necesitas escuchar?
Esto se lee muy obvio, más no lo hacemos. Y lo sé porque me he cachado muchas veces reflexionando en “¿por qué no pienso esto de mi o de mi vida si es tan fácil hacerlo?”
La respuesta es porque nos gana la inercia de la vida.
Así que: ¿Qué narrativa eliges hoy para tu vida? ¿Qué historia y qué palabras quieres que tenga tu adolescente interior?
La narrativa, el mensaje principal de tu vida es quien apunta la dirección que tomas: si en tu narrativa todo es injusto, la vida es lucha, hay que esforzarse y luchar, eres una guerrera (o guerrero), es exactamente lo que vas a tener en la vida.
¿Qué tienes que ajustar en tu narrativa? Define y diseña la nueva narrativa. ¿Cuál es el mensaje principal de tu vida?
Y también es una invitación para que si tienes hijos, sobrinos, niños o jóvenes cercanos:
OBSERVA TUS PALABRAS
Sé el adulto que siembra palabras de gentileza, amor y esperanza, que eso puede cambiar un destino.
Sé el adulto del que quieran acordarse en tiempos de adversidad para decir “sí se puede tener todo en la vida”.
Los abrazo muchísimo. 💗
Gracias por leerme,
Ale
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