19 | enero | 2024
Querida comunidad:
¿Cómo están?
Un viernes más que nos leemos y ¿adivinen qué? no tengo claro la fecha más estoy CASI segura que tenemos dos años leyéndonos cada viernes.
Me acuerdo el primer news oficial que envié de esta dinámica de viernes, bueno, fue el segundo en realidad: estaba en Sayulita con Isra, escribiendo a la orilla de la alberca con un cafecito a lado, muy de Instagram de coach de negocios que te dice habla de la vida de tus sueños jajaja.
Y fue D E L I C I O S O.
Se los juro recuerdo ese momento y fue un sueño mirarme en esa alberca, escribiéndoles el inicio de este News que llena tanto mi corazón. De ese recuerdo quiero agarrarme para iniciar esta entrega y, como siempre, la hilaré con otro tema que tiene que ver con sueños cumplidos y lo normal que se sienten.
En estos dos años de escribir este News cada viernes, si ustedes están acá desde el inicio de los tiempos, han pasado conmigo los momentos más oscuros de mi vida y han tenido de mí todos los moods posibles. Creo que después de esa vez sólo un par de veces más he escrito junto a la piscina o junto al mar o en un spot muy así. Casi todas las veces lo escribo en mi casa, en pijama o en yoga pants corriendo para tenerlo lo antes posible.
Mas hoy hago consciente algo que no tenía así de consciente: el spot de la piscina en Sayulita ha cambiado, es muy cotidiano la verdad, mas el sentimiento del "sueño hecho realidad" sigue siendo el mismo.
Lo que yo sentí esa segunda vez escribiendo el News, la plenitud, la felicidad y el disfrute máximo de ese momento, sigue siendo igual aun este viernes que tengo muchísima alergia, estoy en mi estudio encerrada y con un clima súper frío en CDMX.
Por eso sigo aquí con ustedes cada viernes. Por el disfrute que me da sentarme a escribirles. Gracias inmensas como siempre por recibirme.
La paz, el disfrute y la plenitud que me dan escribir este News viene de meramente escribirlo, no de la psicina, no de Sayulita, no de tener café a lado, sino del disfrute de simplemente hacerlo.
Ahora, uniéndolo con otra reflexión que tuve ayer sobre los sueños., te pido que te tomes un momento para imaginar:
Imagínate que ya cumpliste tu mayor sueño. Ése que es tu máximo de máximos.
¿Cómo te imaginas que vas a sentirte? Cierra los ojos e imagínalo.
Bueno, pues si has cumplido tus más grandes sueños sabes que no se siente nada como te lo imaginas jajaja.
Yo, personalmente, he normalizado TANTO mi vida que se me hace súper ordinaria. Y ayer que tuve que ir a Santa Fe en donde trabajé durante 5 años y que tiene un tráfico infernal, me di cuenta que estoy viviendo EXACTAMENTE lo que pedí con toda mi alma hace 10 años.
Porque aunque ya llevo siendo dueña de negocio aproximadamente 8 años, no me sentía en paz: Tenía preocupación por el dinero, tenía prisa por hacer cosas, agenda llena, sentir el tiempo encima, etc...
Hasta este 2023 y principios 2024 puedo decir que estoy viviendo plenamente mi sueño: ser una dueña de negocio que vive en paz, que no tiene preocupación por el dinero y vive sin prisa y en paz. Hoy si estoy viviendo PLENAMENTE mi sueño.
Sólo que no era consciente de eso. Hice un alto para ver cómo me sentía de saber eso y no sentí la emoción al máximo, sólo sonreí en aceptación de mi vida.
Uniendo las dos reflexiones:
Aunque los factores externos (dinero, casa, relaciones) son muy importantes, el cumplir sueños tiene que ver con un estado interior.
Hacer que tus sueños sean tu vida cotidiana no se va a sentir nada emocionante, al contrario, se va a sentir una paz deliciosa, una paz de normalidad, de que es tu vida de todos los días. Una normalidad tal que se te va a olvidar que algún día lo pediste con todas tus fuerzas.
Eso es lo delicioso de los sueños cumplidos. Darte cuenta de que cambiaste de realidad. Y que, aunque no tenga nada de emocionante a veces, al contrario, se vea lo más cotidiano del mundo, es construir una vida de la que no necesitas vacaciones.
Si ustedes me preguntan, sí me gusta irme de viaje, mas me gusta mil veces más vivir mi día a día, vivir mi rutina, mi vida diaria porque estoy viviendo EL sueño.
¿Qué necesitas tú para tener una vida de la que no necesites vacaciones?
¿Qué necesitas hacer para que tu día a día se sienta como estar tomando el sol en una piscina en Sayulita?
¿Qué te hace sentir inmensamente afortunadx aún en la cotidianidad?
Amigos, si están en un lugar de mucha frustración, tomen este mail como su amiga del futuro que les dice: sí se puede tener una vida de la que no necesitas vacaciones.
Les dejo el episodio del podcast de hoy, créeme, si has batallado con el tema del merecimiento: este episodio es para ti.
Gracias por leerme,
Ale
Comments