julio | 2022
Querida comunidad:
¡Qué felicidad escribirles!
Este News valdrá por dos jaja porque hay mucho que quiero contarles:
Lo primero es, que si me siguen en redes sociales, seguramente se enteraron de que mi cuyo Martina murió de la noche del martes al miércoles. Si no pues, acá la noticia: Desperté el miércoles y ella ya no estaba.
Al parecer todo estaba bien con ella, sabía que no le quedaba mucho tiempo, mas ella seguía comiendo y gritando como siempre. Sólo algo cambió. Desde el miércoles pasado, sentí "algo". Una tristeza profunda. De esa tristeza de finales. Un hueco en el corazón. Lloré desde ese día sin razón, Isra se iba, me quedaba un momentito sola y yo sentía una tristeza terrible. No sabía qué me detonaba eso. Me observé y no tuve respuesta.
El martes en la noche fui a yoga, fue una práctica súper intensa y muy amorosa. Al final, mientras estaba en Savasana, me llegó la siguiente reflexión: "No morí, simplemente nací a lo nuevo". Hasta dije "Órale con mi iluminación y conexión máxima" jajajaja. Ese día en la noche, me despedí de Martina como todas las noches y le dije "Te amo, sabes que eres la reina de esta casa ¿verdad?". Fue lo último que le dije en este plano. 💙
Ahora entiendo que mi tristeza "sin explicación" era Martina. Entiendo que esa iluminación en yoga no fui yo jajaja fue Martina avisándome que se iba.
Aún no sé la gran lección detrás de esto, aún no sé qué vaya a salir de mí con esta experiencia, mas como todo en mi vida, he decidido aprender de ella. Aprender de mí y de lo que siento.
Lo que me llega a contarles el tema original que había pensado para este newsletter y que está relacionado con el episodio del podcast de esta semana:
El otro día vi en IG una publicación que decía algo así como "No digas que las personas que te lastimaron fueron una gran lección. Quien decidió aprender de esa experiencia fuiste tú, ellos y sus acciones horribles no fueron la lección" o algo así, la vi y no me acuerdo quién la publicó, lo cual me dejó reflexionando muchísimo al respecto y lo voy a ligar con la enseñanza de la obra de teatro que vi el fin "22:22" de Odín Dupeyron (altamente recomendable) y es lo siguiente:
Odín es ateo y lo que él expone es que somos nosotros solos en nuestras propias manos. Yo no estoy de acuerdo en el que somos nosotros solos, mas sí estoy de acuerdo en que estamos en nuestras propias manos:
La única persona que decide cómo vivir cada experiencia eres TÚ.
La única persona que decide si es víctima de alguien o no eres TÚ.
La única persona que decide convertir una experiencia horrible en aprendizaje y en lo que mejor que te pudo haber pasado eres TÚ.
La única persona que decide cómo vivir, qué herramientas utilizar y cómo tomar el cierre, el final y la muerte eres TÚ.
Y amigues, para mí es la única y auténtica libertad: saber que no importa qué esté pasando, yo puedo decidir cómo quiero vivirlo. Yo puedo decidir qué acciones emprender, qué elijo aprender de la situación, cómo elijo transitarla... y uufff..
Siempre, SIEMPRE, que me sitúo en el lugar de ser la ÚNICA responsable de mi vida, siento una libertad TOTAL.
Así que elijo aprender de Marti, de su partida, de este dolor y de esta tristeza. No soy pobrecita que está triste por su cuyo. Soy un humano soberano que elige tomar esta tristeza y convertirla en sabiduría.
Bienvenida a tu vida iluminada. 🫶🏼💫
Gracias por estar aquí,
Ale
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